jueves, febrero 10, 2005

Antes y después

Ayer vi las noticias. Tiene tiempo que no lo hacía. Por lo general las noticias son cosas malas. Si habláramos con algún filósofo o pensador moderno seguramente opinaría que las noticias son aquellas cosas que cambian el panorama.

Una noticia es un emergente. Imagínate que tienes un enorme lienzo de color azul celest y derepente, de la nada, sucede que cae una gota roja. Esta gota roja rompe con la estabilidad y tranquilidad de nuestro enorme lienzo.

Pues resulta que viendo las noticias pude ver cómo el presidente Vicente Fox decía que cuando él se vaya muchos lo van a extrañar y adicionó que la economía va bien, estamos creciendo, hay pleno empleo, etc. muchas de esas cosas y declaraciones que en la realidad, para las cientos de miles o incluso millones de personas, resulta difícil de creer.

El echo de que el presidente diga que "lo van a extrañar" es realmente una noticia, pues nuestro azul celeste dista mucho de lo que nuestro querido presidente pueda decir. Pero ¿a dónde nos lleva todo esto? A decirte que cuando la imagen que una persona, político, o empresa no corresponde con la realidad, se crea un vacío de credibilidad.

Este vacío puede hacer que una marca decaiga, que un político sea ignorado o que una persona sea no grata. Es como el viejo refrán, debemos hacer lo que decimos, y actuar como pensamos. Supongamos que una empresa promete ser la panacéa del mercado y al final, cuando lo compras, resulta que no hay esa correspondencia. Lo desecharás de inmediato.

Hay dos momentos cuando hablamos de imagen, una cuando el producto es adquirido, el político es votado o la persona es conocida, y cuando el consumidor o votante lleva al producto o político a la casa y vive la experiencia. Si esta es mala, terminó todo. Por lo general los mercadólogos y político se encargan del primer momento y lo demás lo dejan al "ahi se va".

Sin duda es necesario contar con personas capaces de saber dónde se está parado y dónde se debe de llegar. Hay dos momentos, el antes y el después. En un mundo cada vez más interactivo, no se pueden dejar las cosas al destino. o tu, ¿qué piensas?

La vida es en sí un experimento...
Mauricio Martínez R.
mau_76@hotmail.com


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