Ayer a las 9.30 de la noche se fue uno de nuestros más importantes clienes en la agencia en la cual trabajo. Y hoy muy temprano iniciaron las actividades en una llamada junta de franquicia.
La importancia de que un negocio mantenga una sóla dirección es, a mi parecer, una de las acciones más difíciles de lograr. Cuando leemos a Michael Porter cuando habla de estrategia corporativa, parece todo tan fácil... cuando leemos a Kotler sobre la visión del negocio, parece tan fácil... cuando leemos a Stanton sobre el plan de marketing, parece tan fácil... cuando leemos a Hankins sobre la decisión de compra, parece tan fácil... pero no lo es.
La empresa tiene muchas áreas todas persiguen dentro de sus actividades diarias una serie de objetivos: cobranza tiene que hacer que esas cuentas por pagar, el pasivo se convierta en flujo; marketing, diseñar más y mejores productos que se alineen con lo que espera el consumidor; administración, que los recursos de la empresa se utilicen de forma adecuada, o mejor dicho rentable.
Pero lo que une las actividades de todos es un bien común, es el negocio en sí. Es responder a la pregunta ¿Para qué trabajamos? para hacer esto... para hacer lo otro, etc. Puede que alguna área divage, y no es raro que ocurra, pues cuando la organización se vuelve compleja, los sistemas de comunicación interna son los que deben de unir a todas las partes para que toos vayan en una misma dirección.
Hace seis años trabajé en una empresa en donde éramos 8 personas a lo mucho, de los cuales la mitad eran jefes y la otra mitad éramos empleados. En una organización tan pequeña solía haber vaibenes, mínimos, pero los había, ahora imagínate la complejidad de alinear a 200 ó 400 personas, o a 800 personas en donde posiblemente el 10 porciento de ellas sean directores, y el resto empleados, ó obreros.
Cuando una organización tiene - más que sistemas - una metodología de comunicación, podemos decir que la empresa tienen una gran oportunidad de alcanzar niveles más rentables, tanto en forma de recursos, como en tiempo. Los recursos se podrán apreciar en la forma óptima en la cual son utilizados, y el tiempo en la capacidad de material intelectual que una empresa puede generar con su tiempo libre. Pues cuando una empresa no dedica tiempo para reparar problemas, lo podrá emplear para crecer.
La vida es en sí un experimento...
Mauricio Martínez R.
mau_76@hotmail.com
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